Detalles de Revisión

Trufas mágicas Atlantis | 15 gramos

Trufas mágicas Atlantis | 15 gramos

Revisión de Producto (enviada en 17 de mayo de 2012):
Escribiré es Español ya que me resulta más fácil. Tengo bastante experiencia con las setas, tanto psilocybe como Amanita, pero no había probado las trufas. Os comento un poco la experiencia.
Tras recibirlas el lunes por la mañana ya noté algo especial. Como trabajo de profesor de lunes a viernes programé el viaje para el fin de semana. El miércoles a mediodía comencé el ayuno de forma suave, es decir a base de frutas y verduras hasta el jueves a mediodía. A partir del jueves solo ingerí líquidos (como suelo hacer cuando preparo una sesión especial como ayahuasca o setas), con zumos y dos plátanos por la noche ya que son ricos en triptófano, precursor de serotonina (ya sabréis que la serotonina es el neurotransmisor más similar a la psilicibina. Los receptores sinápticos donde encajan a la perfección las moléculas de psilicina son los que el cerebro tiene para recibir serotonina y esa es la razón de su actividad enteógena o psiquedélica. No me quiero extender en demasía pero es fundamental comprender que la serotonina es junto con las endorfinas (neurotransmisores prácticamente idénticos a la morfina y la heroína) lo que ayuda o guía a la madre en el momento del parto, cuando todos nacemos. Esta es la razón de que la psilocibina (para mí la sustancia más mágica que existe que me permitió alcanzar la iluminación hace 11 años) nos permita renacer, tras una muerte simbólica, aunque real.
Quiero indicar que la admiración y respeto que tengo sobre estas experiencias es máxima, ya que me han cambiado la vida para transformarla en un paraíso constante. Creo que el amor y la familia son lo más importante para ser felices. Si nos encontramos con nuestros seres queridos en paz y armonía, poder disponer de estas sustancias es un regalo del cielo que nos permite realmente convertirnos en seres DIVINOS.
El jueves por la noche consumí una pequeña trufa, riquísima (me pareció que como si fuese una sustancia conocida de toda la vida), junto con una cápsula de harmala, así como 25 semillas de hipomea y 2 de morning glory. El efecto fue suave, aunque percibí claramente el potencial y la calidad de dichas sustancias. El único efecto secundario un poco molesto fue un dolor fino al lado del ombligo, (como el que sentí cuando tuve la iluminación, aunque en aquella ocasión el dolor pasó al placer más inimaginable con una explosión energética que me hizo desaparecer completamente durante yo diría milenios alcanzando el éxtasis, tras lo cual el tiempo desapareció y solo quedó luz, una luz eterna, inconfundible, divina donde reviví toda la historia del Universo y donde mi mujer y mis hijas eran seres eternos, perfectos, inmortales. Al revivir el momento comentado el dolor se difuminó y dormí con sueños lúcidos y mucho placer. El viernes fui a trabajar con una alegría especial y el entendimiento con los alumnos (soy profesor de Educación física) fue magistral.
El viernes no comí ni bebí nada. Pasé la tarde limpiando la casa y preparándolo todo, un altar y diferentes zonas para poder descansar o meditar según me fuese pidiendo la experiencia: colchones en sala y habitación, sillones, zona exterior en terraza.( me extiendo explicando esto porque creo que la preparación es fundamental y me gusta tener todo a mano: tabaco, Santa María, algo de datura…Como me sobró tiempo toqué un poco el violín e incluso canté.
Tenía previsto comenzar a medianoche, pero a las 8 mi mujer me animó a comenzar. Tomé los 14 gramos y pico, el paquete menos el que había tomado la noche anterior. Casi instantáneamente percibí la luz “divina”, me abracé a mi mujer en un momento mágico y le dije que estábamos de nuevo en el cielo. Me pareció una subida muy cálida y agradable, un retorno al paraíso. No noté demasiadas “alteraciones visuales” (comparadas con altas dosis de ayahuasca por ejemplo), pero sí una empatía y amor hacia mi familia, la humanidad y hacia todo el Universo fuera de lo común.
Después vi una película con mi familia, “los 7 de daran” los sonidos y las imágenes eran especiales, lo pasé genial. A las once y pico mi familia se fue a dormir yo me encontraba tan bien que decidí (para no fallar a mi palabra) abrir otro paquete (otros 15 gramos). Todavía no había orinado, por lo que decidí tomarlos con la primera orina como suelo hacer cuando como setas, así cambio la luz blanca original por la fantástica luz dorada del elixir de la eterna juventud.
La orina de la mañana esta llena de hormonas producidas durante la noche y eso lo saben muy bien los sabios orientales, lo que les permite mantenerse jóvenes mucho más tiempo. También saben los chamanes siberianos los beneficios de la orina enteogénica tras la ingesta de la Amanita Muscaria, siendo incluso más valorada que el propio Hongo origen de Papá Noel o Santa Claus que nos trae los regalos cuando somos niños.
A partir de ahí la experiencia fue tan sublime, maravillosa y perfecta que no hay palabras para describirla. De nuevo visité el cielo, de nuevo el tiempo se paró, de nuevo vino la LUZ y el SONIDO divinos. De nuevo la vida me enseño que todos somos seres divinos, que somos UNO, que solamente tenemos que amar y agradecer a todos nuestros hermanos humanos, a toda la humanidad, sin importar religión, país o color su compañía su esfuerzo por hacer del planeta un lugar cada vez mejor. Así es y así será siempre. Este 2012 es un año especial, como sabían muy bien los sabios Mayas, uno de los pueblos mejor conocedores del hongo y los misterios del Universo. También lo sabían los Griegos con sus iniciaciones en Eleusis, y los Egipcios, Incas, Persas, Chinos, Japoneses…. Este es el año del reencuentro, del gozo. Todo eso que ya sabía, por que todos lo sabemos, aunque sea inconscientemente.
Todo esto y mucho más me lo recordaron, dejándolo impreso en todo mi ser de forma imborrable las maravillosas piedras filosófales de Atlantis.

Agradezco enormemente de todo corazón a Magic-Mushrooms-Shop.com ofrecernos productos de una calidad impecable, ya que tanto las esclerotias como las setas (cuya experiencia contaré en otra ocasión) son impresionantes. Un auténtico placer.
Muchas gracias a toda la humanidad por vivir conmigo en este maravilloso planeta.
Desde Galicia (España) y Brasil.
Alberto y familia.